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sábado, 6 de agosto de 2016

Mañana en el Adaja. Villanueva de Duero

Los días calurosos de verano es todo un placer
 madrugar para ir al campo.

Nada más llegar, en unas tierras junto a un maizal, soprendía a un zorro a lo lejos con un conejo en la boca. Desafortunadamente no pude hacerle ninguna foto dada la distancia y la rapidez con la que se ocultó en el maizal.

Ya en el pinar pude oir el suave tamborileo de un trepador azul buscando comida




















Los abejarucos continuamente me sobrevolaban emitiendo su característico reclamo. Algún rato se posaron en una rama seca


















    Tampoco tuve tiempo de fotografiar un grupo de oropéndolas, macho y hembra que por un momento abandonaron la verde y humeda vegetación de la ribera del rio e hicieron una pequeña incursión en el pinar.

En el rio se podían ver varios barbos en busca de comida. Y a lo que en Valladolid llamamos "cacho" y en otras zonas como León "gallegos". En realidad su nombre es leucisco y es un pez deportivamente atractivo dado que entra muy bien a mosca

















Al final del paseo una pareja de Pico Picapinos me entretuvieron un rato mientras intentaba fotografiarlos.


















y ya al ir a montar en el coche hice un par de fotos en unos nidos de avión común, en la entrada de la urbanización Las Tinajas. Los polluelos piaban insistentemente pidiendo su ración



















y a casa que el calor aprieta. Me queda pendiente otra visita, en la que intentaré fotografiar a las oropéndolas, aunque no es nada sencillo